El primer laboratorio científico de la historia

¿Cómo disponer de la basura?



Una construcción icónica de la ciudad de Nueva York, el antiguo estadio de beisbol de los Yanquis, fue demolido en el año 2009 para dar lugar a un parque. Esto, a pesar de las protestas de aquellos que demandaban fuera conservado por su significado histórico. Dicho estadio fue inaugurado en 1923 y sirvió de casa por 85 años a los Yanquis de Babe Ruth, Joe Dimaggio y Mickey Mantle. Fue testigo de 39 de los 40 títulos de liga y de 26 de las 27 Series Mundiales ganadas por los Yanquis, que convierten a este equipo, con mucho, en el máximo ganador en la historia de las Grandes Ligas.

El papel histórico que jugó el estadio de los Yanquis en el beisbol norteamericano no fue, desgraciadamente, suficiente para salvarlo de la demolición que se inició apenas los Yanquis contaron con un nuevo escenario. El nuevo estadio de los Yanquis fue construido junto al antiguo y en su diseño se mantuvieron algunas características del original como reconocimiento a su significado histórico, incluyendo la característica cenefa en su parte superior. Como quiera que haya sido, sin embargo, el hecho es que el inmueble histórico acabó convertido en un montón de escombros.

La demolición de antiguo estadio de los Yanquis puede ser también visto en el contexto de los desechos que produjo. La percepción más común sobre la basura se centra en aquella generada por las casas-habitación, las oficinas y los comercios, y que es recogida por los servicios públicos municipales. De hecho, sin embargo, esta clase de desechos es solamente un porcentaje pequeño del total. En efecto, se encuentra, por ejemplo, que el sector de la construcción y demolición, juntamente con la minería y la manufactura, generan el 75% de todos los desechos que producen los 27 países de la Unión Europea.

Por otro lado, el consenso entre los expertos es que la generación de desechos en el mundo no es auto sostenible y que se deben tomar medidas para mitigar sus efectos. En línea con esto, en el número especial de la revista “Science” aparecido esta semana, se incluye una sección con varios artículos en la que se trata el problema de los desechos y de las maneras de atacarlo.

Como se asienta en la introducción a dichos artículos, en ellos se resalta cómo los desechos pueden a menudo llegar a ser valiosos convirtiéndose en insumos para otras industrias y contribuyendo así a disminuir el consumo de materias primas. Además, a partir de los desechos es posible fabricar combustibles, medicinas y cosméticos, al mismo tiempo que los metales y los plásticos pueden ser reciclados varias veces. De la misma manera, algunos desechos pueden ser usados para la generación de energía eléctrica.

La facilidad para reciclar un producto debe ser contemplada en su diseño. Hay quien piensa que el problema de los desechos es debido precisamente a una falla de diseño. Es decir, si un material o producto no puede ser reciclado es porque necesita ser rediseñado. La concepción de un producto no debe entonces contemplar solamente las fases de fabricación y comercialización, sino también una fase posterior de reciclado.

Según los expertos, para un uso y disposición eficiente de los desechos se deben superar barreras de naturaleza no solamente científica y tecnológica, sino también política, económica e incluso sicológica. Como ejemplo de esto último, se cita la resistencia natural a considerar como agua potable aquella obtenida de la purificación de aguas negras, lo que técnicamente es, sin embargo, posible.

El no haber demolido el estadio de los Yanquis no hubiera, por supuesto, resuelto el problema de la basura en el mundo. Podemos tomarla, no obstante, como una indicación de que tenemos que modificar nuestra percepción acerca de la generación de desechos y tomar en cuenta el impacto ambiental que éstos producen. Después de todo, construir un nuevo estadio no era absolutamente necesario.

Todo lo anterior al margen de la poca consideración que se tuvo por un recinto de enorme significado histórico –y posiblemente sentimental– para numerosos norteamericanos.

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